Lo que me inquieta ahora es la falta de apetito y si acaso tuviese un origen físico. Recomendaron una serie de análisis para detectar la posible causa, aunque éste pudiera ser emocional pues es muy sabido el tremendo apego que Frida tiene a su abuela quien está ausente por las fiestas.
Por lo pronto estoy recurriendo a viejo truco de alimentarla con "jeringazos" de papillas preparadas especialmente para ella y por mí.
Estoy seguro (espero) que tan pronto su abuela regrese, el apetito de Frida mejorará; tiene que hacerlo ya que enfrenta grandes y difíciles retos y su edad no la ayuda mucho. ¡Estoy contigo, mi vida!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario